En 12 de enero de 2022, el Gobierno Federal publicó el reglamento PNRS - Decreto nº 10.936/22, cuyo principal objetivo es modernizar y hacer más eficiente la forma en que el país trata los residuos, exigiendo al sector público y privado transparencia en gestión de residuos.
Con la logística inversa obligatoria, las empresas tendrán que repensar su estrategia de producción, logística, durabilidad de los productos e incluso la comunicación con sus clientes, ampliando las bases para la educación encaminada al consumo consciente y la economía circular.
La importancia de la gestión de residuos
La regulación de la gestión de residuos sólidos ha crecido significativamente a partir de 2010 en Brasil, con la Política Nacional de Residuos Sólidos (PNRS) un marco legal para incentivar la implementación de la Economía Circular.
Esto porque apoya la comprensión de los impactos del proceso productivo, no solo en el uso de materias primas, sino también en el final de vida de los productos consumidos en el mercado. Con instrumentos que prevén la jerarquía de actividades y la prioridad en la prevención y reducción de la generación de residuos, promueve el concepto de diseño circular. Además, valora claramente los pilares de la Economía Circular en su secuencia de orientación:
- Priorizar la no generación;
- Desarrollar medios para la reducción;
- Reutilizar;
- Reciclaje;
- Tratamiento;
- Disposición final ambientalmente racional.
Este marco legal apoya el proceso de transición de las ciudades a un modelo de economía circular, ya que crea mecanismos de disposición circular para estos residuos, lo que permite el desarrollo de nuevos negocios y reducción de la demanda por recursos naturales. Además, estimula una nueva forma de pensar en la sociedad, cada vez más sostenible.
Logística inversa
Determina que los fabricantes, importadores, distribuidores, comercializadores, consumidores y servicios públicos de aseo urbano y manejo de residuos sólidos son responsables del ciclo de vida de los productos. La responsabilidad compartida se implantará de forma individualizada y encadenada. Es decir, al producir y vender un producto, la empresa no está exenta de responsabilidad por su impacto al final de su ciclo de vida.
Para un país de dimensiones continentales, la importancia de una política enfocada en la logística inversa representa un elemento estratégico, pues favorece la creación de centros de recepción, tratamiento y distribución de materiales. Este hecho reduce los obstáculos logísticos fundamentales para la expansión de la economía circular.
Para esto, una importante herramienta es un instrumento para la coordinación e integración de los sistemas de logística inversa a fin de potenciar el logro de los resultados de los diferentes sistemas en el país, ya sean implementados o en proceso. Así como garantizar una mejor comunicación a la ciudadanía sobre los puntos de entrega voluntaria para la disposición adecuada de los residuos, asegurando la trazabilidad de los materiales.
La regulación del PNRS fue un hito legislativo importante para que Brasil avanzara profundamente en acciones dirigidas a la circularidad. Sin embargo, uno de sus mayores potenciales es expandir la noción de consumo de la sociedad y la circularidad de los materiales.